08 octubre 2007

A solas con la luna


Nunca fue, tan sólo, aquella dolorosa de mirada baja que llegaba a la Campana de mi niñez cerrando la Semana Santa y con ello sumiéndome en la anual nostalgia, a veces ni siquiera contenida. La Soledad siempre significó mucho más que el sonido de las sillas que se cierran, de los besos de despedida hasta una próxima ocasión o si no hasta el Domingo de Ramos venidero. Tiene ese privilegio, sí, el de abrochar la semana de los sueños; pero también su rostro, su llanto silencioso, su tristeza calma..., tienen mucho que ver con Sevilla, con su barrio de siempre, con mi propia existencia.
Tiene la Soledad hechuras de becqueriana cofradía, no lo fue, pero sí que puede enorgullecerse de ser la más murubesca de esta ciudad de los versos eternos. La Soledad es uno de esos retazos de la Semana Santa que sabes que nunca cambiará, que permanecerá inalterada como el sonido de esas campanas de San Lorenzo, recuerdos de mujer emparedada y de hermosa Madrugada de Dios.
La Soledad vive en el templo que habitó el Señor por muchos siglos, en el que se casaron Enrique y Amalia, que bautizaron a mi padre y a sus otros dos hijos ante Ella. Vive muy cerca del colegio donde estudió mi madre de pequeña, del diminuto taller en un compás de fuente y de naranjos donde se restauraba eternamente mi Niño Jesús prometido, de la bodega donde paraba quien fue su nazareno, de la farmacia, de la lechería, de la frutería de la calle Santa Ana... La Soledad era la guardiana de todo ese universo, tan metido en mí que cada vez que piso San Lorenzo me sigo sintiendo el niño que está pasando el fin de semana en casa de la abuela.
Mucho debe tener que ver todo esto en que, cuando cada Sábado Santo veo regresar las largas filas de nazarenos de escapulario y manguitos por la estrechez de Capuchinas, todos ellos me parezcan salidos a media tarde de una casa de patio sevillano de la calle Santa Clara. Es el momento en que la cofradía discurre más señorial que nunca: cortejo de elegancia para la Soledad de paso presuroso camino de la plaza, llorosa al pie de la Cruz, tan sólo acompañada en su dolor por la luna de Rodríguez Buzón, la última luna de la Semana Santa.
(A mis primas pequeñas: Ángela de la Cruz y María, en el CDL aniversario de la hermandad que rinde culto a la Virgen por culpa de la cual vinieron al mundo).

27 comentarios:

Híspalis dijo...

Precioso homenaje. Estupéndamente relatado hasta tal punto que me ha parecido vivirlo, oliendo incluso a azahar... un fuerte abrazo.

Anónimo dijo...

Precioso y lleno de emotividad.

Para mi ,Pregonero, siempre que me hablan de esta cofradía recuerdo aquella voz lejana que me decia: "Mira, allí viene la última Cruz de Guia..."

Un abrazo

bogar dijo...

Enhorabuena.Muy bonito pregonero.
Saludos

el aguaó dijo...

No puedes escucharla, pero dentro de mí cabeza suena una ovación. Enhorabuena amigo. Un bello homenaje.

La Soledad de San Lorenzo es una de las Hermandades que poseen un significado especial. Yo siempre elijo la plaza para verla. Siempre la espero a la derecha de la puerta de Su parroquia, entre Ella y el Señor de Sevilla. La veo venir por Cardenal Spínola, en silencio, en Soledad, a oscuras entre la luz de sus cirios, acercarse con su paso delicado mientras la acarician saetas que surcan el aire de San Lorenzo.

Es el final de la Semana Mayor. El principio de las Vísperas. Para mí siempre será el broche que cierra la Pasión.

Un fuerte abrazo.

Enrique Henares dijo...

Desde ese mismo lugar que señalas la vi yo entrar este año.
Sin lugar a dudas este es también para mi el broche único de la Semana Santa, a veces he intentado que sea el que algunos señalan como tal, pero no ha logrado embargarme de emoción como ese instante mágico de la Soledad en la plaza donde siempre es otoño.

Reyes dijo...

Muy bonito, cada vez estoy mas convencida de porqué eres el Pregonero de Sevilla.
A La Soledad le ocurre lo que a mi Amargura, encierra muchas historias de mayores.
Enhorabuena por sentir y podernoslo contar.

El morfólogo dijo...

CUANDO TENÍA GANAS E INSPIRACIÓN - SOBRE TODO GANAS- PARA ESCRIBIR, SOLÍA DESCRIBIR CON MÁS O MENOS FORTUNA, MIS RECUERDOS. TÚ, MI QUERIDO "CURRO", LO HACES "CUASI PERFECTAMENTE".

"A SOLAS CON LA LUNA" TIENE -SIEMPRE DESDE MI PUNTO DE VISTA- VARIAS VIRTUDES: BUENA DESCRIPCIÓN DE TU ÉPOCA EN EL BARRIO Y EN LA CASA QUE TANTO COMPARTÍ CONTIGO. HAY DOCUMENTOS GRÁFICOS DE MI ESTRECHA RELACIÓN DE JUEGOS CUANDO ERAS PEQUEÑO;TÚ EN MIS BRAZOS, YO CON BARBA... CERCANO MI PREGÓN UNIVERSITARIO QUE A TI TE NIEGAN INCOMPRENSIBLEMENTE. ¿SERÁ PORQUE UN TERCER HENARES EN LA NÓMINA PESA DEMASIADO? ¿SERÁ PORQUE TU PADRE -MI HERMANO- AÚN NO HA SIDO PREGONERO DE LA SEMANA SANTA DE SEVILLA POR VAYA USTED A SABER QUÉ RAZONES?...
TAMBIÉN HAY DOCUMENTOS GRÁFICOS DE TU AFICIÓN NO PERDIDA AL TORO Y AL TOREO; AZOTEA DE JESÚS DEL GRAN PODER. LA ABUELA AMALIA COMO PRIMERA PRESIDENTA DE UNA CORRIDA IMAGINARIA EN SEVILLA Y EN LAS ALTURAS, CON VARIAS DE LAS MEJORES ESPADAÑAS DE SEVILLA OBSERVÁNDOTE. YO, REPORTERO GRÁFICO Y, A MUCHA HONRA, TU TORO IDEAL PARA ENSEÑARTE A PARAR, TEMPLAR Y MANDAR. TU PADRE Y YO JUGÁBAMOS MUCHO AL TORO,CORNAMENTA INCLUIDA QUE EL ABUELO ENRIQUE ME CONSIGUIÓ CREYENDO -YO TAMBIÉN- QUE PODRÍA SER TORERO. POR BURLADEROS, ALLÁ EN CALLE SANTA ANA,LAS BUTACAS VERDES CON PINTITAS NEGRAS DE TU BISABUELA ROSALÍA, LA MUJER DE TU BISABUELO ENRIQUE "EL ALMENDRO"... UN DÍA DEBERÍAS PONER AQUELLA FOTO QUE TE HICE EN TU CASA TOREANDO CON EL CAPOTE; QUIZÁS HAYAS SIDO UNO DE LOS ÚLTIMOS NIÑOS QUE HAYA JUGADO AL TORO.
HACE TANTO TIEMPO QUE NO ESCRIBO, QUE ME ESTOY EXTENDIENDO MÁS DE LO RECOMENDABLE.
SÓLO DECIRTE QUE CADA VEZ QUE RECUERDAS A LOS ABUELOS SE ME SALTAN LAS LÁGRIMAS; A MÍ QUE CADA DÍA, CADA HORA, LOS TENGO PRESENTES. ¡QUÉ BUENA GENTE ERES! UN BESO Y UN ABRAZO DE TU MORFÓLOGO.

Enrique Henares dijo...

Muchas gracias por tu comentario, Manuel. Sin duda servirá para que mis queridos lectores y amigos me conozcan más aún de lo que ya lo habrán hecho a través de estos artículos, puramente vivenciales, que a veces me gusta incorporar al blog.
Es evidente que son los más fáciles de escribir, porque los dicta el corazón y la memoria, por ello mi papel sólo consiste en teclear y en disfrutar de esos sevillanísimos recuerdos, como estos que, al hilo de la Soledad de San Lorenzo, tienen como protagonista al barrio y las personas que tanto disfruté de niño.
No voy a negarte que durante algún tiempo albergué la ilusión de ser pregonero universitario, precisamente por eso, porque mi padre fue el primero y tú también lo pronunciaste años más tarde. Pero después de que un cobarde (no tardé en descubrirlo) me atacase a través del anonimato de su nick en el desaparecido Foro El Nazareno respondiendo a la propuesta de mi nombre realizada por algunos foreros, siempre tuve claro que jamás lo sería, por mucho que cambiasen las cosas, porque parafraseando a aquel estúpido "antes que pregonero hay que ser persona" y yo lo soy.
Qué mejor auditorio que éste, repleto de múltiples amigos, algunos de ellos desconocidos para mí, y que comparten mi pasión de pregonar Sevilla, que lejos de perseguir atriles (eso es de "guiñao") no es otra cosa que contarle día a día lo que sientes viviendo en ella y todo aquello que sus ritos y sus celebraciones provocan en ti. No cambio ni la más alta tribuna (la que todos los cofrades que nos gusta escribir soñamos) por esta gran familia que he formado en mi blog.

Pd: Hace tiempo que preparo una entrada que bajo el título "El niño que jugaba al toro" estaría acompañada de esa foto que citas. En cuanto vuelva mi hermano de Granada le pido que me eche una mano con el escáner

el aguaó dijo...

No te preocupes amigo, porque para mi (y pongo la mano en el fuego que para mucha gente) eres El Pregonero, con mayúsculas. He dicho.

Un fuerte abrazo.

P.D. Si estabas entre el Señor de Sevilla y la Parroquia de San Lorenzo estábamos muy próximos. Yo me suelo situar en el lugar donde la Soledad da la vuelta, muy cerca de la puerta.

Alberto Ramírez Jiménez dijo...

Amigo Pregonero, tu apodo no es gratuito.

Me encanta ver a la Soledad de vuelta, cuando desemboca en la Plaza de San Lorenzo acompañada de la saeta, del Sacri a poder ser.
Muchos son los que cuestionan la belleza de esta Dolorosa, más aún en estos tiempos en los que se lleva imágenes de serie y copias con algun detalle significativo, pero a mi, personalmente, me encanta la Soldead, su paso, su ambiente, su recogimiento, su ensimismamiento, esos labios sellados de dolor, esa tristeza contenida, esa reflexión a los pies de la cruz abrazando la corona de espino.

Un saludo

Anónimo dijo...

Nada ha revivido tanto mi dormida memoria como tus escritos. Fue comenzar a leerte y volver a verlo todo de nuevo...
Gracias querido Pregonero.

Anónimo dijo...

HOLA QUIQUE SOY MIGUEL SOBRINO DE TU TIO MIGUEL ANGEL TE ESCRIBO PORQUE TE VOY A PONER UNA POESIA QUE LE HICE A MI VIRGEN DE LA SOLEDAD HAY TE LA PONGO Y TU YA ME DICE:ES UNA BARRIO SIGULA
UN SABADO DE COFRADIA
SALDRE CON MI HERMANDAD

MI TUNICA Y CAPIROTE
MI CIRIO Y MI ANTIFAZ
MUY NERVIOSO YO ME ENCUENTRO
CUANDO LA HORA
CERCA ESTA

MIS AMIGO ME ESPERAN
LA PLAZA LLENA ESTA
MI VIRGEN ESTA EN LA CALLE
MI VIRGEN DE LA SOLEDAD

SAETA SUENA EN EL BARRIO
MI VIRGEN MUY CRCA ESTA
Y YO LE PIDO REZANDO
QUE EL AÑO QUE VIENE
LA PUEDA ACOMPAÑAR

PD:ME A ENCANTADO LAS COSA QUE LE AS DICHO A MI VIRGEN

Enrique Henares dijo...

Ole ahí los niños poetas de San Lorenzo!!
De aquí a unos años vamos a tener que dar un pregón "a la limón", jaja!!
Gracias a ti glauca por tu fidelidad a mi rinconcito sevillano.

Anónimo dijo...

Que sería de la Semana Santa sin la Soledad...que bellas palabras, Quique. Tengo una sobrina totalmente hechizada de esta Virgen y hace que a mi también me arrastre hacia Ella...cosa que le agradezco :D

vicenteeldelasalmendras dijo...

Y si encima llevara musica...

Enrique Henares dijo...

Tiene usted toda la razón, en mi opinión una banda de música no le hubiera hecho daño alguno a esta salida extraordinaria.

Lucía dijo...

Pregonero, me encanta esta entrada. Ahora mismo iba a poner una sobre el mismo tema en mi blog, pero con esta competencia... Seguramnete nos cruzaremos, callejeando esta tarde.

Enrique Henares dijo...

Una delicia la Soledad por el andén con ese marchón de Pedro Morales, se abre un debate?

Les Corts dijo...

Querido Enrique:

A mi también me has robado la entrada sobre la Soledad, pero no hay mal que por bien no venga, ¿quién mejor para escribir sobre Ella que nuestro PREGONERO?.
Al final va a resultar que la noche del Sábado Santo en San Lorenzo, va a ser otro de los lugares comunes de ésta comunidad virtual (cómo Doña María Coronel); yo también me despido de ella junto a la basílica, aunque eso sí todavía con la ropa de faena que traigo de San Marcos.
Un fortísimo abrazo, Enrique.

PS: A ver si nos vemos por la facultad, que a Txomin lo veo casi todos los días.

Lucía dijo...

La verdad es que la última media hora de la Soledad en la calle me cautivó. Pero, sin embargo, esa hora y media que echó desde la salida de la catedral hasta entrar en Tetuán no me gustó nada. Para mi sobraban bacalaos y el paso debería haberse girado delante del ayuntamiento mientras sonaba la música.
Me quedo con la entrada en San Lorenzo.

Enrique Henares dijo...

Ayer falté a la cita en San Lorenzo, dejé el paso entrando en Tetuán. Así que me quedo con el buen sabor de boca del pasado Sábado Santo, en el que al igual que calleferia y por primera vez, acudí con la ropa de faena, recién llegado desde San Marcos.
Por la facultad voy poco. Me quedan sólo cinco y ando más centrado en quitármelas de encima de una vez que en las clases. De todas formas en breve tengo que ir a recopilar apuntes y visitar despachos. Espero veros y charlar un rato con vosotros de lo que más nos gusta.

Anónimo dijo...

Desde Almendralejo, invito a Vds. a visitar mis 2 BLOGS, sus direcciones son:
gomato.blogspot.com 11870.com/blog/173
Gracias.-

el aguaó dijo...

Me gustó mucho la conjunción de la marcha con el paso de La Soledad, pero sigo siendo partidario de recibir en San Lorenzo y a oscuras, el rachear silencioso de los costaleros que portan el silencio de La Soledad de San Lorenzo.

Un abrazo amigo.

Anónimo dijo...

Yo estoy con el aguaó.
El silencio de la Soledad es música, solo hay que saber oirla.

Enrique Henares dijo...

Pues si lo dice glauca, que de música sabe una jartá, eso va a misa.

Anónimo dijo...

Conduce Señora nuestras miserias, hacia el filtro del Amor. Tu, a Quien en Tu Soledad veneramos.

Excelente relato, nos estremeses con una descripcion tan vívida. Que la Señora bendiga y conserve inalterable esa piedad tan "Soleana". Un abrazo, desde Lima - Perú.

Cofradia de la Soledad de Lima

Anónimo dijo...

Nice brief and this post helped me alot in my college assignement. Thank you seeking your information.